Mujer, 39, asturiana. Y madrileña. Madre de dos, esposa de uno, y pediatra. El orden varía según el momento.
Villamocos es mi casa. Bueno, más bien de mi familia y mía, que si no tuviera familia, no habría mocos… En Villamocos vivimos servidora, Ironman, Trotandovoy (o Miss Trotona) y Miss Berrinche. No vive aquí, pero casi, Meripopins. Y, como ser animado y poco participativo, una tortuga llamada Tuli. Como seres inanimados y altamente protagonistas, dos violonchelos (de diferente tamaño, todo hay que decirlo).
Ironman es mi marido y también padre de las criaturas (de Trotandovoy y Miss Berrinche). El mote Ironman le viene al pelo: se dedica a eso profesionalmente. Al iron, o mejor dicho al steel: el mundo del acero. Pero además, fruto de una crisis de los 40 ciertamente prematura, o -no lo tengo claro- de una hernia de disco que le dejó baldáu hace ya un tiempo, se ha entregado al deporte [off the record: si el marido de una se pone más cachas es algo bueno, ¿no? ¿o no? sí, ¿verdad?].
Trotandovoy (o Miss Trotona) es mi hija mayor. La canción original que le da el mote la refleja fielmente, sobre todo lo de «por el camí-i-noooo, yo méntre-tengoooo». Es el ser humano más positivo que conozco, o casi. Es la representación de Bob Esponja en la Tierra.
Miss Berrinche es mi hija pequeña, pero sólo es 14 meses menor que Trotandovoy. Es más insistente que el mejor vendedor de Planeta Agostini, más dulce que el más exquisito de los macarons parisinos -de hecho también atiende por la Petite- y físicamente, un clon de mi suegra. Salvo las orejas; las orejas, son mías.
Meripopins es la cuidadora de las nenas y parte de mi corteza cerebral prefrontal desde hace 8 años. Llegó aquí de coña; estábamos en alerta roja desesperados por encontrar a alguien que arrimara el hombro (hacían falta, en aquélla época MIReña, muuuuuuchos hombros) en Villamocos, y apareció ella. Y aquí sigue.
Y Servidora. 🙂
Me flipas. Que talento tienes, hija. Eres un prodigio. Besazo! 🙂
Acabo de leerme casi todas las entradas de tu blog en un ratito!… Como asturiana, madrileña y madre de un precioso tigreton de 3 años, espero sinceramente, que tu blog llegue a los oidos de muchas madres preocupadas horrorizadas y muertas de sueño que necesiten que alguien les explique que los mocos de sus pequeños retoños, en la mayoria de los casos son mocos «normales»…
Un blog genial y sobre todo, contado de esa manera que necesitamos aveces cuando solamente queremos que nuestro pequeño felino se cure…y nos hace tanta falta saber cómo ayudarlo…
Nieves
Gracias! Me encantan tus palabras!… Y por supuesto, encantada si difundes el blog! Y también si me sugerís temas sobre los que hablar. Un saludo (también al tigretón!).
Esta genial… lo explicas genial.
Muchas gracias por seguirme y poner PEDIATRADEURGENCIAS entre tus blogs que sigues! todo un honor!. Muy interesante tu blog y muy ameno, enhorabuena!
Gracias a ti, Miguel Angel. Y felicidades por el tuyo, que me encanta!! Seguiremos escribiendo!
Aquí una internista novata con vena pediatra descubriendo las aventuras de Villamocos 🙂 Me encanta tu blog!! Seguiré muy atenta, con cambio de rumbo incluido! 😉
Gracias Saray!! Animo con esa residencia, una de las más intensas, medicina interna! Un beso!